lunes, 14 de mayo de 2007

a-saltar la ciudad













a-saltando

Supongamos una ciudad gobernada por Macri, quién hasta el 2001 estaba inscripto en los padrones de Misiones, provincia por la cual quería llegar a diputado o senador de la mano del menemismo, hasta que se enamoró del Obelisco. Un porteño que haya comprado un Fiat a Sevel (empresa de Macri), llega al trabajo manejando por Autopistas del Sol (empresa de Macri), comete una infracción de tránsito y es fotografiada por Intron SA (empresa de Macri), y luego deja el auto en uno de los estacionamientos que tiene en Buenos Aires la compañía Sideco Americana (empresa de Macri). Antes de ir a la oficina, paga sus facturas en Pago Fácil (empresa de Macri), y manda una carta documento por Correo Argentino (empresa de Macri).Mauricio Macri niega que alguna empresa suya tenga relación con la Ciudad de Buenos Aires, pero mientras se candidatea a la Jefatura porteña, sigue siendo el accionista mayoritario. A fines de abril de este año, el por entonces candidato a Jefe de Gobierno porteño y hoy ministro de Justicia, Gustavo Beliz, había afirmado que para despejar toda sospecha de fraude en la elección porteña, era indispensable que el Correo Argentino, propiedad de la familia Macri y deudor de un canon multimillonario al Estado, no sea el que cuente los votos de los vecinos de la Ciudad de Buenos Aires.De todos modos, cuando se cierren los comicios, las urnas serán trasladadas al centro de cómputos del Correo Argentino. Lo que hay que tener en cuenta es el proyecto de la oligarquía vernácula que hoy no tiene, en un contexto democrático, una cara que los represente, especialmente cuando el globo López Murphy se desinfle en los próximos meses. Los serviles dirigentes políticos que se venden a esos sectores, en este momento no tienen cabida y/o son impresentables, de allí la urgencia de los cipayos de formar un ariete de su puro riñón.

1 comentario:

Anónimo dijo...

ja ja. muy bueno!